«No debe aprobarse así, es necesario hacerle cambios»
Las acciones tendentes para detener el incremento en los precios de los insumos del campo, en especial los fertilizantes y los combustibles, impulsados por el conflicto entre Rusia y Ucrania, deben ser un esfuerzo conjunto entre el sector privado y el gobierno, ya que es una labor que no podrá llevar a cabo solamente el empresariado mexicano.
Empresarios del Sector Agroindustrial de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), aseguraron que el costo de los fertilizantes del campo en México ha sido notable al colocarse por arriba de los 24 mil pesos la tonelada y por arriba de los 30 mil presos en algunos casos, lo que incluso ha llevado a un aumento en los precios del maíz y del trigo, que ha sido del 44% y el 22% respectivamente.
En conferencia de prensa para dar a conocer los detalles del Foro Internacional Agroindustrial de la Canacintra, mismo que se desarrollará de forma hibrida los días nueve y 10 de junio, Esteban Chavoya, presidente del Sector Agroindustrial de esta Cámara, dijo que a pesar de que la espiral de costos ya se presentaba, el conflicto bélico la ha profundizado.
Para hacer frente a este aumento, dijo, es necesario fomentar el interés que muestran grandes inversionistas internacionales en el campo mexicano con el fin de traer al país proyectos de producción de biofertilizantes, los cuales se han ido multiplicando en territorio nacional.
Juan Manuel Sánchez Carranco, vicepresidente nacional de Sectores y Ramas Industriales de Canacintra, reconoció por su parte que la pandemia rompió muchas cadenas de suministro no solo en México sino en toda América latina.
Dijo que, bajo su nueva presidencia nacional, Canacintra tiene el firme propósito de atender y considerar todos los proyectos provenientes del gobierno federal, estatales y municipales, con el fin de trabajar en equipo con aquellos que beneficien a sus empresas socias, generen empleo y beneficien al país.
Con respeto a la propuesta oficial de reforma energética, afirmó que de aprobarse ésta como ha sido enviada por el ejecutivo al Congreso, haría un gran daño al país, por lo que es necesario hacerle cambios con base en argumentos técnicos fundamentados para que ésta no signifique el incumplimiento de tratados internacionales, lo que puede lograrse con cambios en reglamentos sin modificar la constitución.
Por su parte, Sergio Rubén Sosa, primer vicepresidente del Sector Agroindustrial de Canacintra reconoció que hay un evidente fenómeno inflacionario en el país, mismo que debe atenderse con múltiples acciones sin riesgos para México.
“Pensamos que hay controles a nivel nacional e internacional que si se aplican correctamente permitirán atemperar los incrementos, no el control de precios porque sale peor, pero sí como resultado de mesas de consensos para definir estrategias en donde el gobierno federal esté muy atento y les dé seguimiento”.