Por Observatorio Ciudadano de Movilidad Querétaro
Es un hecho comprobado a nivel mundial, en un elevado porcentaje, que las campañas de concientización vial tienen un impacto marginal en los hábitos de manejo. Los conductores ignoran las indicaciones y señalamientos viales. Indicaciones que debieron conocer antes de conseguir su licencia de manejo.
El “respeto a la cultura vial”, también descarga en las y los ciudadanos, algo que está en manos del estado cumplir y hacer cumplir: la seguridad vial. Cuando las condiciones viales son pensadas y ejecutadas desde un diseño que piensa en las personas más vulnerables, la “cultura vial” se vuelve innecesaria.
En Querétaro, la única ciclovía que no tiene quejas de autos estacionados que la hagan intransitable es la Av. Universidad. Su diseño hace que no precise la colocación de letreros de “no invadir la ciclovía”.Con ese ejemplo, más allá de espectaculares y campañas mediáticas, lo más adecuado en “Fray Junípero Serra” y vialidades similares, radica en el control de la velocidad a través de la infraestructura.
Opciones y alternativas para la pacificación del tránsito son muchas y variadas: desaparición de la pinta de los carriles; carriles angostos que reduzcan la sensación de seguridad al ir a velocidad excesiva; obstáculos físicos que ralenticen el desplazamiento de los automóviles y hagan cumplir lo estipulado en la nueva Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, donde ordena una velocidad máxima de 50 Km/h en zonas urbanas.Un asunto más, que nos inquieta. ¿Por qué las fotomultas son inviables? ¿En qué estudios técnicos se sustenta dicha conclusión? ¿Por qué aplicar la tecnología no es factible en Queretaro, tratándose de seguridad vial? ¿Por qué es necesario que un auto vaya a más de 50 Km/h, siendo que la velocidad de una persona caminando es apenas 5 km/h?
Las altas velocidades son el privilegio de unos cuantos, con graves consecuencias sociales, que no pueden estar por encima de los beneficios colectivos. En el distribuidor vial “Fray Junípero Serra”, hay muchas personas que caminan, otras en bicicleta y la mayoría que se desplaza en transporte colectivo. Son estas personas a quienes se les ha colocado una vez más, en desventaja.
No olvidemos que atender sus necesidades de movilidad ya no es una concesión graciosa, sino un mandato de la Constitución en su artículo cuarto, donde la movilidad sustentable (peatonal, ciclista, en transporte colectivo) tiene prioridad sobre los desplazamientos en auto. Banquetas amplias y seguras, cruces a nivel de calle, iluminación adecuada, pasos de cebra con mantenimiento constante, así como la pacificación del tránsito se requiere en esta y otras demás vialidades en el corto plazo.Confiamos en que los próximos días, el gobernadordel estado, un hombre que en pocos meses ha mostrado alta sensibilidad y con la cualidad de la rectificación, atienda esta demanda colectiva que afecta a todas las personas que habitamos en el estado.
No olvidemos que de acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la zona metropolitana de Querétaro es la tercera más peligrosa a nivel nacional respecto de incidentes viales. No merecemos ese ignominioso lugar, sino al contrario. Con acciones como las descritas previamente, podemos ser ejemplo anivel nacionaly latinoamericanode ciudad segura por sus buenas prácticas en movilidad. La seguridad vial también es seguridad pública.
